Este sábado, el juez federal Daniel Rafecas ordenó la detención de un sospechoso del intento de atentado con explosivos en la sede de la Sociedad Rural Argentina (SRA), el pasado jueves. Tras una investigación llevada a cabo por la División Investigaciones Especiales de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires y el Juzgado Federal N°7, se arrestó a Alberto Santiago Soria, de 40 años, luego del allanamiento en su domicilio.
Su detención fue posible gracias al análisis exhaustivo de cámaras de seguridad ubicadas en las cercanías del lugar del ataque, así como al rastreo de su trayecto utilizando dos líneas de colectivos y el estudio de los usuarios de tarjetas SUBE, según fuentes cercanas a la investigación.
Uno de los elementos clave para su identificación fue un análisis comparativo científico (antropo-scopométrico), que permitió cotejar tanto el rostro como la postura corporal del sospechoso con los registros obtenidos en las cámaras de seguridad. Este análisis arrojó un resultado positivo, lo que condujo a su detención.
En las próximas horas, Soria será trasladado a los tribunales de Comodoro Py, donde será indagado por el juez Rafecas. Se le imputan los delitos de explosión, lesiones dolosas múltiples y daños materiales. Posteriormente, se espera que sea derivado a un complejo penitenciario del Servicio Penitenciario Federal (SPF).
Video: así explotó el paquete que le enviaron al presidente de la Sociedad RuralDurante el allanamiento en su domicilio, los investigadores hallaron pruebas relevantes que refuerzan la hipótesis de su participación en el ataque. Entre los elementos encontrados, destaca una guía “T” de la ciudad de Buenos Aires, con una anotación manuscrita que hacía referencia a “La Rural” y la ubicación exacta del edificio de oficinas de la Sociedad Rural Argentina, en Juncal 4450.
El ataque, que causó pánico en las instalaciones de la SRA, dejó un saldo de cinco personas afectadas por la inhalación del humo generado por la explosión. Las pericias están en curso para determinar la composición química del explosivo utilizado, así como para evaluar el impacto en la salud de las víctimas y cuantificar los daños materiales.
Soria ya había sido imputado en 2017 en una causa por amenazas antisemitas anónimas, un antecedente que podría agravar su situación legal. Por ahora, la investigación sigue su curso, centrada en esclarecer los motivos detrás del atentado y determinar si Soria actuó solo o contó con la ayuda de cómplices.